El sábado 16 y el domingo 17 de noviembre se realizó la Salida Misionera 2013 a José C.Paz.
Fuimos un grupo de 37 personas, de las cuales 27 eran alumnas, 4 exalumnas y 6 adultos (María G, Mini, Leonor, Maria Marta Alvarado y el P.Andrés). Allá nos acompañaron Susana Batemarco, Silvina Ferrari, Mary y Reina que trabajan en el Centro Conín; Marta y Susana que ayudan en la Capilla de allí.
Llegamos al Centro y de allí, partimos con la imagen de la Virgen María de la Capilla del Colegio a visitar las casas del Barrio “El Ceibo”. Fue muy fuerte ver cómo la gente pasaba y besaba la imagen, se detenía a rezar, hacía laseñal de la cruz con devoción y cariño. María abrió las puertas de los corazones y de cada casa. Por eso la imagen de la Virgen vuelve al Colegio “misionada y misionera”.
A la tarde tuvimos distintos encuentros con niños, jóvenes y adultos, cantando y rezando y después compartimos todos juntos la misa. Al otro día, fuimos a visitar algunas casas cerca del Centro y después compartimos la misa y el almuerzo.
Realmente fue una experiencia muy enriquecedora en distintos aspectos. Aunque fuimos un grupo de misioneros, nos sentimos acompañados por toda la comunidad de San Martín de Tours desde la oración, el apoyo, el cariño y los recuerdos que cada curso realizó para las misioneras y para la gente que íbamos a visitar.
Nos encontramos con una comunidad de José C.PAz que nos esperaban con ansias, que no abrieron las puertas de sus casas, pero sobre todo de sus corazones porque compartieron sus vivencias, sus alegrías, sus tristezas, sus sueños, su vida…
En pocas horas vivimos experiencias muy intensas que nos llenaron el corazón y nos confirmó la alegría que brota de compartir la fe.
Fuimos para anunciar a Jesús y Dios nos sorprende como siempre porque nos encontramos con un Jesús vivo en cada una de esas familias que nos conmovió profundamente.
Estamos felices porque cumplimos la misión que Jesús nos confió y el mandato que nos dió el Papa Francisco: “Vayan, hagan lío, salgan a la calle, contagien la alegría de la Fe en Jesús”. Sin duda, la misión SMT 2013 fue una gracia de Dios.
Mechi Alonso