El miércoles 8 de abril la comunidad se reunió para celebrar la fiesta de la Pascua:
¡La Buena Noticia de la Resurrección de Cristo!
Fue una fiesta y juntos cantamos:
¡Vive el Señor!
¿Dónde? ¡Entre nosotros!
¿Dónde? ¡En cada uno!
¡Vive el Señor!
El Papa Francisco nos invita ahora a anunciar esta gran noticia:
“¡Cristo ha resucitado!. Y, en Él, por el Bautismo, también nosotros hemos resucitado … Ésta es la buena noticia que estamos llamados a anunciar a los demás y en todo ambiente, animados por el Espíritu Santo. La fe en la resurrección de Jesús y la esperanza que Él nos ha traído es el don más bello que el cristiano puede y debe ofrecer a sus hermanos. A todos y cada uno, entonces, no nos cansemos de repetir: ¡Cristo resucitó! … Repitámoslo con las palabras, pero sobre todo con el testimonio de nuestra vida. La alegre noticia de la Resurrección debería manifestarse en nuestro rostro, en nuestros sentimientos y actitudes, en el modo con el cual tratamos a los demás.
Nosotros anunciamos la resurrección de Cristo cuando su luz ilumina los momentos oscuros de nuestra existencia y podemos compartirla con los demás; cuando sabemos sonreír con quien sonríe y llorar con quien llora; cuando caminamos junto a quien está triste y corre el riesgo de perder la esperanza; cuando transmitimos nuestra experiencia de fe a quien está en búsqueda de sentido y de felicidad. Y ahí con nuestra actitud, con nuestro testimonio, con nuestra vida decimos “Jesús resucitó”, con toda el alma”